La inflación, estimada a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC), volvió a desacelerar durante mayo. La variación interanual (de junio 2022 a mayo 2023) bajó a 0,88%.
Con este valor, el indicador se colocó por debajo de la meta del Banco Central de Costa Rica (BCCR), que fijó en un rango de entre el 2% y el 4%.
Este miércoles 7 de junio, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) actualizó el IPC, como lo hace mensualmente.
Para mayo, los bienes y servicios que más aumentaron de precio, y que tuvieron un mayor efecto en el bolsillo de las personas, fueron: los boletos aéreos, la gasolina, los huevos, los automóviles nuevos y la pechuga de pollo.
También aumentaron de precio el transporte en autobús, el chile dulce, la papa, las entradas al cine y los cereales para el desayuno, etcétera.
Por el contrario, disminuyeron: la telefonía móvil, el tomate, aceite, los paquetes turísticos al extranjero, la cebolla, frijoles, atún en conserva, posta de cerdo, entre otros.
De los 289 bienes y servicios que integran el índice, un 48% subió de precio, un 37% bajó y un 15% no presentó variación.
Mientras tanto, si esos bienes y servicios se dividen en categorías, las que mostraron una mayor variación hacia arriba son: transporte, servicios financieros y seguros, bebidas alcohólicas y tabaco, educación, prendas de vestir y calzado y salud.
Las categorías que muestran una disminución de precios son: información y comunicación, alimentos y bebidas no alcohólicas, recreación, deporte y cultura y bienes y servicios diversos.
La variación mensual del índice llegó a -0,11%. En este caso se comparan los precios de abril con los de mayo del 2023.
Según el INEC, durante los últimos cinco años se han registrado tres meses de mayo con variaciones mensuales negativas.
En mayo del 2020 llegó a -0,15% y en en mayo del 2021 a -0,01%.
Por debajo del rango meta
El Banco Central había adelantado que la inflación interanual podría ubicarse por debajo del límite inferior del rango meta (2%), debido a un efecto base asociado a los niveles altos que registró el índice en 2022.
Una vez superado dicho efecto base, se espera que la inflación retorne a cifras cercanas al 3% hacia finales de 2023.
Según el último Informe de Política Monetaria del BCCR, desde enero, el país experimenta una moderación en los aumentos interanuales de los precios de los bienes, principalmente en alimentos y bebidas.
Además, señala que influyó la política monetaria restrictiva que aplicó el banco, al subir las tasas de interés.
El mismo documento indica que las expectativas inflacionarias a 12 y 24 meses, han disminuido en comparación con los máximos registrados en agosto de 2022, lo cual sugiere una reducción en la presión inflacionaria en el futuro.
Movimientos abruptos en el mercado cambiario y condiciones climáticas adversas (que afectan al sector agro, principalmente) se consideran riesgos para este buen pronóstico.