El precio del dólar en el Mercado de Monedas Extranjeras (Monex) bajó ¢189,71 en casi tres años, al pasar de ¢696,76, el 21 de junio del 2022, a ¢507,05, el 9 de junio del 2025, según el promedio ponderado.
Esta apreciación del colón frente al dólar modificó el panorama para distintos actores de la economía costarricense. Quienes fueron parte de los más perjudicados por el tipo de cambio alto en 2022, por ejemplo, se convirtieron en los nuevos beneficiados, y viceversa.
Con el bajo nivel del precio del dólar, ¿quiénes son los catalogados ganadores y quiénes son los perdedores? La Nación lo resume a continuación.

Ganadores de la baja en el dólar
En el grupo de ganadores destacan los importadores, debido a que adquieren productos en dólares y los venden en Costa Rica en moneda nacional. De esta forma, destinan menos colones para comprar la mercadería en el exterior.
También se benefician las personas y empresas que tienen deudas en dólares, pero perciben sus ingresos en la moneda local, pues requieren menos colones para atender sus obligaciones crediticias en la divisa extranjera.
Por ejemplo. Una persona que gane en colones y tenga un crédito prendario en dólares, cuya cuota mensual es de $400, habría destinado ¢277.504 para el pago de la mensualidad, el 2 de junio del 2022, según el tipo de cambio de venta de referencia del Banco Central de Costa Rica (BCCR). Tres años después, el monto a desembolsar por la misma cuota habría sido de ¢203.976.
El nivel del tipo de cambio, aunado a las tasas de interés en la moneda extranjera, puede ocasionar la toma de créditos en dólares por parte de no generadores.
“En los últimos dos años se vio un interés de los hogares y de las empresas en endeudarse en dólares a pesar de que su ingreso no sea en la misma moneda, esto porque la tasa de interés es muchísimo más atractiva en dólares con respecto a los colones”, dijo Marco Otoya, director del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (Cinpe), de la Universidad Nacional (UNA).
La baja en el tipo de cambio también favorece a los hogares con ingresos en colones que deciden comprar bienes con precios en dólares, como vehículos, o viajar fuera de Costa Rica por turismo.
Adicionalmente, beneficia a los inquilinos que reciben su salario en colones, pero el alquiler de su vivienda está pactado en dólares. Por la baja en el precio de la moneda extranjera, destinan menos colones que hace tres años, por ejemplo, para hacerle frente al pago de su cuota.
Perdedores por bajo tipo de cambio
En la otra cara de la moneda se encuentra el sector del turismo. A criterio de Daniel Ortiz, director de Consejeros Económicos y Financieros (Cefsa), este es el perdedor “más grande” de la apreciación de la moneda nacional frente al dólar. “Costa Rica ha perdido competitividad respecto a otros destinos”, agregó.
El sector exportador también es uno de los perjudicados. Aunque recibe dólares por sus ventas, una parte importante de sus gastos está en moneda nacional. Ante esto, se ven obligados a destinar más divisas para cumplir con sus compromisos.
Luego de que el dólar empezara su camino hacia la baja, los sectores afectados se pronunciaron en distintas ocasiones para manifestar su preocupación.
En enero del 2023, la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco) indicó en un comunicado de prensa que el sector sufría un impacto constante por el comportamiento del tipo de cambio y que “podría generar cierre de empresas; dada, la pérdida de competitividad en los mercados externos, la reducción de márgenes de ganancia y por ende, la dificultad de afrontar obligaciones en moneda local”.
En mayo del 2024, representantes de distintos sectores productivos del país, entre ellos el exportador y el de turismo, realizaron una marcha pacífica, “en demanda de ajustes en la política económica, monetaria y cambiaria”.
“Cada centavo de deslizamiento en el tipo de cambio del dólar hacia la baja representa entre ¢50 y ¢100 menos que tienen las empresas para pagar los salarios de 690.000 costarricenses de todo el país, con mayor incidencia en zonas rurales que dependen del sector productivo y amenaza con generar más desempleo”, expresó el presidente de la Cámara de Exportadores, Víctor Pérez, en aquel momento.
Cuando el precio del dólar estuvo cercano a los ¢700, estos sectores fueron parte de los beneficiados.
Finalmente, el director de Cefsa mencionó que dentro de los perdedores por la baja en el tipo de cambio también están algunas industrias que no logran competir con los precios de productos importados, las personas que ganan en dólares pero tienen sus gastos en colones y el Ministerio de Hacienda, “porque ha visto su recaudación afectada en los últimos dos años”.