La producción costarricense, medida con la serie tendencia ciclo del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), registró en noviembre pasado un crecimiento interanual del 4,5%.
Así se desprende de los datos más recientes del Banco Central de Costa Rica, publicados este viernes.
Esta cifra marca una desaceleración de 0,2 puntos porcentuales en relación con igual mes del 2023, pero una aceleración de dos décimas con respecto al mes anterior.
Aún falta conocer los datos de cierre del año, que estarán disponibles en febrero de 2025.
Diferente velocidad
La actividad económica crece a diferente velocidad en cada régimen de producción.
El régimen definitivo (donde se ubica el 90% de las empresas costarricenses) creció en noviembre un 3,6% en términos interanuales; con dos meses consecutivos de aceleración mensual y un crecimiento medio del 3,6% de enero a noviembre del 2024.
Nueve de las quince actividades del régimen definitivo crecieron a tasas superiores a las del mismo mes del año anterior, entre ellas, la construcción, los servicios profesionales y el transporte.
Por otro lado, la producción de las actividades agropecuarias y los hoteles registró una disminución con respecto al año anterior, influida principalmente por condiciones climáticas adversas.
En el otro segmento de la producción, los regímenes especiales (zonas francas) continúan con un significativo crecimiento de la producción (13%) debido a las mayores exportaciones de implementos médicos, servicios a oficinas principales, servicios de desarrollo de software y tecnologías de información.
La contribución porcentual del régimen definitivo a la tasa de crecimiento del IMAE se incrementa por segundo mes consecutivo, sin embargo, este aporte es inferior al del mismo mes del año previo.