Los ingresos por impuestos del Gobierno Central tuvieron una baja por segundo año consecutivo en el 2024. Al cierre del año pasado, la recaudación del Ministerio de Hacienda fue equivalente al 13,4% del producto interno bruto (PIB) de Costa Rica.
En el 2023, muestra la información difundida por Hacienda este jueves, los tributos cobrados ascendieron al 13,6% del PIB. En contraste, en el 2022 se logró un porcentaje más elevado como referencia a la producción al alcanzar el 14,1% de la producción.
Hacienda confirmó que la caída en la recaudación del impuesto sobre la renta y del tributo a la propiedad de vehículos explicó el resultado del año pasado.
“El impuesto a los ingresos y utilidades, así como el impuesto a la propiedad, registraron caídas anuales significativas al cierre de 2024. Este comportamiento impactó, de manera negativa, el crecimiento de los ingresos tributarios durante el 2024″, reconoció la entidad pública.
Según la información, la recaudación del impuesto sobre las utilidades tanto de personas como empresas, fue de ¢2.423.251 millones, es decir ¢65.932 millones menos frente a los ¢2.489.183 millones en el 2023. La baja más relevante ocurrió en el pago de renta hecho por las empresas.
En el caso del impuesto a la propiedad de vehículos, tributo que se cobra en el marchamo, el ingreso fue de ¢198.514 millones en el 2024, lo cual significó una caída de ¢32.194 millones, frente a los ¢230.708 millones del año previo.
La consecuencia para las cifras fiscales del Gobierno fue que el déficit financiero fue de 3,8% del PIB (¢1.853.704 millones) en el 2024. Mientras que un año antes ascendió a 3,3% de la producción, es decir, ¢1.532.119 millones.
En el ascenso del desequilibrio fiscal influyó que el superávit primario (ingresos menos gastos, sin incluir el pago de deuda) disminuyó el año pasado. Los datos de Hacienda muestran que fue de ¢520.696 millones, equivalente a 1,1% del PIB. Pero en el 2023, fue de ¢729.712 millones (1,6% del PIB), con lo cual se registró una reducción de ¢209.016 millones.
Nogui Acosta, jerarca de Hacienda, destacó como aspecto positivo que el endeudamiento del Poder Ejecutivo cerró por debajo del 60% del PIB, pues finalizó en 59,8% de la producción. Pero aceptó que el problema fiscal no está resuelto.
“No podemos reducir más los impuestos, ni seguir aprobando nuevas exoneraciones, tampoco debilitar la regla fiscal ni aprobar nuevos gastos sin contenido presupuestario; acciones que hasta hoy siguen minando los esfuerzos para alcanzar la sostenibilidad fiscal”, dijo el jerarca.
Gasto gubernamental
Los egresos totales del Gobierno fueron equivalentes al 18,9% de la producción (¢9.263.765 millones), mientras que en 2023 significó un 18,5% de la producción del país, es decir, ¢8.714.351 millones.
El pago de salarios fue el rubro con mayor dinamismo. Al cierre del 2024 fue de ¢2.825.141 millones, o sea un incremento de ¢171.819 millones, frente a los ¢2.653.322 millones en el año previo, según Hacienda.
Las transferencias al sector público y privado fue el otro componente del gasto con el mayor incremento. El año pasado se ubicó en ¢2.972.192 millones, un alza de ¢117.093 millones, comparado con los ¢2.855.099 millones en 2023.
Por último, el pago de los intereses de la deuda fue de ¢2.374.400 millones en el 2024, un incremento de ¢112.568 millones, frente a los ¢2.261.831 millones del año previo, según datos hacendarios.