Un total de 160 empresas calificadas como Grandes Contribyentes Nacionales (GCN) y Grandes Empresas Territoriales (GETES) reportaron cero ganancias o pérdidas en el 2022, a pesar de reportar activos por más de ¢8.406 billones e ingresos brutos por ¢3.775 billones.
La declaración de pérdida o cero ganancias exime a las empresas de pagar el impuesto sobre la renta que equivale al 30% de sus utilidades y las grandes empresas que se reportan en esta condición son objeto de escrutinio desde el 2018, cuando por primera vez se publico la lista y se reveló que era conformada por grandes bancos privados, constructoras, medios de comunicación y otras compañías de renombre nacional.
En promedio, entre el 2021 y el 2022, un 13,2% del total de contribuyentes (60.934) al impuesto sobre los ingresos y las utilidades declararon pérdidas (35.467) o cero ganancias (25.467). Los activos totales declarados por este grupo asciende en promedio a ¢19,4 billones y los ingresos brutos declarados a ¢7,3 billones.
Además, la cantidad de contribuyentes que omiten declarar impuestos sobre ingresos y utilidades aumentó: pasó de un 20,1% en el 2021 a un 24,7% en el 2022. De igual forma entre quienes son obligados tributarios del IVA y omiten la declaración de impuestos ya que pasaron de un 13,2% en el 2021 a un 24,3% en el primer semestre del 2023.
Comprobantes electrónicos
Los datos fueron publicados por la Contraloría General de la República (CGR) en su informe de auditoría sobre la eficacia del sistema de comprobantes electrónicos como mecanismo de control en el cobro del IVA y de los impuestos sobre los ingresos y utilidades.
“Según el último Informe disponible, el incumplimiento tributario representa un 5,0% del PIB , es decir cerca de ¢1,8 billones de colones con cifras a 2018. Estos recursos son ingresos que pierden las arcas del Estado costarricense” apunta el informe.
Los comprobantes electrónicos son una de las herramientas utilizadas para fiscalizar el pago de impuestos y podría llegar a reducir la evasión y elusión del pago de impuestos, pero su reporte está disminuyendo y la Dirección General de Tibutación subutiliza este recurso al auditar.
“En los periodos 2021, 2022 y primer semestre de 2023, un 37,2%, 30,2% y 42,8% de obligados tributarios del impuesto sobre el valor agregado faltaron al deber de emitir comprobantes electrónicos. Esto significa un nivel bajo de eficacia en esta obligación en 2021 y 2022, y muy bajo en 2023. Asimismo, la cantidad de obligados tributarios del impuesto sobre los ingresos y las utilidades que faltaron a dicho deber fue de 25,9% y 29,2% para el 2021 y 2022, para una eficacia media en ambos casos” reporta la CGR.
La CGR también señala debilidades en el control trubutario en la Dirección General de Tributación en cuanto el uso de estos comprobantes durante las auditorías, ya que en un 41% de los casos de fiscalización programada en el IVA que utilizan este insumo no se ejecutan.