El déficit financiero del Gobierno registró una desmejora al inicio de este año, al alcanzar ¢101.244 millones, es decir -0,2% del Producto Interno Bruto (PIB) 2024.
La suma representa ¢20.753 millones más si se compara con el mismo periodo del año anterior, cuando se registró un déficit de ¢80.491 millones (-0,2% del PIB 2023), según las cifras fiscales divulgadas este martes por el Ministerio de Hacienda.
Esta diferencia se explica por el leve deterioro que registró el balance primario a raíz de que el pago de intereses a enero fue menor al registrado en el mismo periodo del año anterior por ¢9.215 millones.
Este balance negativo es el resultado de alcanzar ¢671.130 millones de ingresos (1,4% del PIB 2024) y registrar un gasto total de ¢772.374 millones (1,6% del PIB 2024) a enero.
Según Hacienda, a enero del presente año se alcanzó un superávit primario de 0,2% del PIB. Este es el segundo mejor registrado a enero en los últimos tres años, y el cuarto si se toma en consideración el periodo 2006-2008.
El superávit primario alcanzó ¢81.947 millones y mostró una reducción de ¢29.969 millones en comparación con el mismo periodo de 2023 (¢111.915 millones).
Esto se explica, principalmente, por una desmejora en los ingresos por ¢5.886 millones y un incremento neto del gasto primario por ¢24.083 millones. Este último obedece, sobre todo, a un mayor monto registrado en las transferencias corrientes, si se compara con el mismo periodo del año anterior.
De acuerdo con la información, este balance positivo es el resultado de alcanzar ¢671.130 millones de ingresos totales (1,4% del PIB 2024) y registrar un gasto primario de ¢589.184 millones (1,2% del PIB 2024) a enero.
El pago de intereses de la deuda, por su parte, alcanzó ¢183.191 millones (0,4% del PIB) y presentó un decrecimiento de 4,8% interanual, en comparación con el mismo periodo de 2023 (¢192.406 millones). Este resultado representó 7,4% del total de los recursos presupuestados (¢2.480.335 millones, 5,0% del PIB 2024).
La tasa de crecimiento de los ingresos totales registrada a enero reflejó una caída. Pasó de 10,6% en enero de 2003 a -0,9% en enero de 2024. Esto se reflejó al comparar la relación de los ingresos a PIB, que pasaron de 1,44% en 2023 a 1,35% este año, una diferencia de 0,09 puntos porcentuales (p.p.) de PIB.
Los ingresos tributarios, por su parte, registraron una caída de 1,7% con respecto a enero de 2023. Esto se explica por la disminución en la recaudación del impuesto a la propiedad de vehículos (32,2%), de los ingresos y utilidades (3,7%) y exportaciones (2,3%). Los rubros que compensaron dicho decrecimiento fueron la recaudación del impuesto al valor agregado (2,8%), impuesto único a los combustibles (33,7%), selectivo de consumo (3,9%), impuesto a las importaciones (5,8%) y otros impuestos tributarios (10,5%).
De manera preliminar, la deuda a enero de 2024 cerró en 58,4% del PIB, una diferencia de 2,7 p.p. de PIB en comparación con el cierre de 2023 (61,1% del PIB).
Asimismo, al comparar el saldo de la deuda con el cierre de 2023 (1,9%) este apenas creció 0,8%, por debajo del promedio registrado en el periodo 2009- 2024 (13,5%).
El ministro de Hacienda, Nogui Acosta, dijo que este es un año de retos y reconoció que aunque la estrategia fiscal sigue dando buenos resultados a enero, aún falta camino por recorrer para contar con unas finanzas estables y consolidadas.
“He dicho que Hacienda no tiene el monopolio de la responsabilidad fiscal y que el esfuerzo para avanzar lo debemos hacer entre todas las fuerzas políticas y económicas del país. El futuro de Costa Rica dependerá de las decisiones que tomemos hoy, la realidad fiscal nos exige ser rigurosos, debemos tener claro que no necesariamente más gasto es mejor gasto. También nos dice que es preciso ser más eficientes y justos en la recaudación de impuestos, así como que es fundamental gestionar estratégicamente nuestra deuda”, agregó.