El proyecto de ley que busca condonar las deudas por marchamos atrasados prácticamente murió en el plenario de la Asamblea Legislativa, la tarde de este martes, cuando una mayoría de diputados votó en contra de dispensarlo de todos los trámites.
Solamente 19 legisladores votaron a favor, la mayoría del Partido Liberación Nacional (PLN), mientras que 21 se opusieron a que avanzara de forma expedita este plan, el cual fue presentado por el liberacionista Danny Vargas.
En contra votaron congresistas de los partidos Progreso Social Democrático (PPSD), Unidad Social Cristiana (PUSC), Nueva República (PNR), Frente Amplio (FA) y Liberal Progresista.
Aunque se intentó revisar dicha votación, tampoco esa moción tuvo los votos necesarios. Se rechazó con 22 votos en contra y solo 20 a favor.
¿Qué decía la propuesta?
La iniciativa de ley pretende perdonar todas las deudas por derecho de circulación que un contribuyente tenga atrasadas, del 2024 para atrás, bajo la condición de que el contribuyente pague lo correspondiente al marchamo 2025, antes del 1.º de enero de ese año.
La Asamblea Legislativa ya ha aprobado ese tipo de condonación anteriormente, a través de dos leyes, una impulsada por Erwen Masís, del PUSC, en el 2021, para quienes pagaran el marchamo 2022, así como en setiembre del 2023, en esa ocasión por una iniciativa impulsada por el PLN.
El perdón incluiría todos los rubros que se cobran dentro del marchamo: impuesto, seguro, cánones y timbres, así como los intereses, multas y sanciones pendientes.
Ya desde la reunión de las jefaturas de fracción, la jefa del oficialismo, Pilar Cisneros, anunció su oposición y la del gobierno.
‘Serios problemas fiscales’
En una nota enviada al Congreso, el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, aseguró que el expediente plantea “serios problemas fiscales y genera estímulos negativos para el cumplimiento de las obligaciones tributarias”.
El jerarca enfatizó que la condonación motiva el incumplimiento de las obligaciones tributarias y eso provoca serios desequilibrios económicos y financieros en las arcas del Estado.
De acuerdo con Acosta, solo en el perdón del impuesto a la propiedad de los vehículos (uno de los componentes del marchamo) aprobada el año pasado, se generó una pérdida fiscal de ¢12.947 millones.
“Para el año 2024, más de 77.000 vehículos se acogieron a dicho beneficio. Esta cantidad de automotores, si bien pagó casi ¢2.000 millones, analizando el costo de oportunidad, o lo que es equivalente a la pérdida fiscal, este representó aproximadamente 6,5 veces este monto. Es decir, se dejaron de percibir casi ¢13.000 millones. Esto significó, en promedio, un costo unitario de ¢168.000 por vehículo, aproximadamente”, advirtió el ministro.
“Esta medida no solo afecta la recaudación, sino que deteriora aún más la cultura de responsabilidad tributaria en el país, ya que se refuerza la noción de que estos beneficios fiscales serán periódicos, y basta con esperar la siguiente condonación para no cumplir con las obligaciones fiscales a tiempo”, indicó el ministro en su argumentación.