Los ataques aéreos israelíes contra instalaciones nucleares en Irán intensificaron el conflicto que data de décadas atrás entre ambas naciones. La tensión estalló durante la noche del 12 de junio en Oriente Medio y ya empieza a mostrar sus primeras repercusiones a nivel mundial.
La escalada del conflicto sacudió el precio internacional del petróleo que, en el primer día de ataque, tuvo un incremento de 8%, situándose en $74 el valor del barril de crudo en la referencia internacional Brent (referencia petrolera europea). La razón es clara: cerca del 30% del crudo y el 20% del gas licuado transitan por el estrecho de Ormuz, una ruta estratégica junto al territorio iraní.
En Costa Rica también se experimentará el efecto del incremento en el precio mundial del petróleo a pesar de que el país importa principalmente desde Estados Unidos. El precio del barril de crudo de ese origen se rige por la referencia West Texas Intermediate (WTI), cuyo valor se cotizó en $71,8 un día antes del ataque y desde entonces se mantiene por encima de los $73.
Karla Montero, presidenta de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), aseguró que el costo de los combustibles sufrirá ajustes en el territorio nacional y será en las próximas semanas, cuando dispongan con la información completa de los alcances del conflicto, que realizarán el siguiente ajuste tarifario.
Un aumento en el precio de los combustibles suele ser solo el comienzo: bienes importados y productos básicos también podrían encarecerse debido al alza en los costos de transporte. Este efecto en cadena pondrá presión sobre la inflación local.
Combustibles más caros
El ataque israelí agitó los mercados globales de petróleo, afectando directamente a uno de los principales productores de crudo del mundo; este enfrentamiento tiene como resultado al menos 224 personas fallecidas y casi 2.000 resultaron heridas, de acuerdo con datos del Ministerio de Salud de Irán al 18 de junio.
En respuesta, Irán amenazó con cerrar el estrecho de Ormuz si la ofensiva israelí se intensifica. Aunque esta amenaza defensiva aún no se concreta, la sola posibilidad de un cierre del estrecho de Ormuz genera nerviosismo en los mercados.
“El precio del petróleo tuvo un aumento significativo en los primeros días del bombardeo de Israel a Irán, pero la proyección es que puede estar más elevado en las próximas semanas. El precio podría llegar hasta los $150 por barril”, estimó Gerald Solano, académico e investigador de la cátedra de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de la Universidad Nacional (UNA), con base en la proyección de la firma financiera JP Morgan.
Si bien Costa Rica importa los hidrocarburos mayormente de EE. UU., y no de Oriente Medio, las repercusiones se sentirán a nivel nacional al aumentar la demanda a través de la incertidumbre que genera la posibilidad de que el 30% de la producción mundial quede varada en el Golfo Pérsico.
En solo tres días, tanto el WTI como el Brent aumentaron casi $3 por barril. El comportamiento refleja la alta sensibilidad del mercado a los eventos geopolíticos en zonas productoras clave.
De acuerdo con Montero, lo que sucede en regiones productoras de petróleo tiene un impacto directo en las tarifas locales y en la economía del país. Por lo tanto, el panorama internacional sugiere que el incremento en el precio de los combustibles será inminente.
Un antecedente cercano de tensiones geopolíticas que encarecen el precio del petróleo se situó con el estallido de la guerra en Ucrania en febrero de 2022. Durante los primeros cuatro meses el barril de crudo se estableció por encima de los $100; en ese periodo el costo del litro de gasolina súper en Costa Rica se cotizó por encima de los ¢1.000.
La presión actual sobre el costo del crudo llega en un momento donde el mercado nacional mantiene precios inferiores a los de meses atrás. Al 5 de junio la gasolina súper se fijó en ¢665 por litro, monto más bajo registrado desde enero; el litro de diésel se cotizó en ¢530 en junio, siendo el monto más bajo registrado desde marzo de 2021, de acuerdo con datos de Recope.
Inflación e importaciones
Elizabeth Morales, subdirectora de Coopecaja, indicó que la economía nacional se expone a que la inflación aumente 0,25%. A pesar de que esa subida encarece los precios, el país se acercaría a la meta de inflación establecida por el Banco Central de Costa Rica (BCCR), que es de 3% con ±1 punto porcentual de tolerancia.
El crecimiento en los precios de los bienes en territorio nacional puede ser aún mayor si el conflicto escala a un ataque nuclear. Israel tiene como objetivo destruir las instalaciones nucleares de Irán y espera que EE. UU. se una con ellos.
Donald Trump, presidente de EE. UU., informó que aún no toma una decisión final sobre la solicitud que hizo Israel. No obstante, Irán advirtió de que el país de Trump sufriría un daño irreparable si intervenía a favor de Benjamín Netanyahu.
Sin necesidad de que el enfrentamiento en Oriente Medio escale más, los bienes sí sufrirán consecuencias en precio y tiempo debido al conflicto que ya está por cumplir su primera semana.
Los electrónicos y algunos productos farmacéuticos son dos bienes que pueden verse afectados por mayor tiempo de tránsito debido a que viajan desde Asia, según Solano.
El costo del flete, el seguro de transporte, los alimentos y bienes aumentan su precio conforme aumenta el de los combustibles. Este efecto dominó golpea la economía del país, elevando la inflación debido al encarecimiento de productos que generará la depreciación del colón.
“Un incremento en el precio del petróleo y gas encarece el transporte en general, así como los procesos industriales en todo el mundo, por lo que la estructura de costos de las cadenas de valor se ven afectadas”, comentó Jaime Morales, gerente de Comercio Exterior de la firma Grant Thornton.
El conflicto en Oriente Medio tendrá efectos en el bolsillo de los consumidores finales, quienes pagan cualquier subida de costos que experimentan los empresarios.