En un mundo donde los pagos digitales crecen y la lucha contra la evasión fiscal se intensifica, Costa Rica necesita explorar nuevas formas de financiar prioridades urgentes como la seguridad.
En poco menos de cuatro años, el Ministerio de Hacienda reporta más de ¢81 mil millones recaudados por el cobro del impuesto al valor agregado (IVA) a los llamados servicios transfronterizos.