De acuerdo con el sistema de consulta del Ministerio de Hacienda, esas empresas acumularon deudas, al momento de la firma del contrato de patrocinio y durante la ejecución del convenio, hasta por ¢43,7 millones.

Por ejemplo, en noviembre de 2021, el INS entregó ¢10,1 millones a Inversiones Romero del Este S. A. para la presentación de una colección de moda relacionada con el bicentenario. Esos recursos, provenientes del erario público, se desembolsaron a pesar de que esa empresa adeudaba ¢4,9 millones por el no pago de varios periodos correspondientes al impuesto sobre el valor agregado y sobre las utilidades, entre otros.

Esa firma también registra otros pendientes tributarios posteriores a la fecha de aprobación del patrocinio.

Capturas del sistema de consulta del Ministerio de Hacienda muestran el detalle de pendientes de la empresa Inversiones Romero del Este.

Lo mismo sucedió en febrero de 2021 con IQ Radio, empresa a la que el INS otorgó ¢1,5 millones para un concierto virtual del día del amor y la amistad, pese a que esa compañía acumulaba pendientes por ¢9,8 millones por varios tributos.

Al igual que Inversiones Romero del Este, registran otros montos fijados posterior a la firma del contrato de patrocinio.

El sistema en línea del Ministerio de Hacienda muestra el detalle de las deudas de IQ Radio.

A Eventos Verdes, sociedad anónima que gestionó, en febrero de 2023, el patrocinio para Ligia Madrigal, atleta costarricense que intentó llegar a la cima del monte Everest, en Nepal, la aseguradora estatal le entregó ¢27,4 millones. Información de Hacienda revela que, para ese momento, debían poco más de ¢100.000 por el impuesto al valor agregado y a las utilidades.

A pesar de que se le mostraron las imágenes del sistema en línea de Hacienda, Madrigal dijo que esa información no era correcta.

Kattia Castro Cruz, subdirectora de Relaciones Corporativas del INS, admitió que años atrás no se hacía la verificación del estado de los patrocinados con respecto a las obligaciones estatales, como pago de impuestos, Seguridad Social y otros. Sin embargo, desde el presente año se empezaron a realizar esos controles.

No obstante, dos de los casos mencionados ocurrieron en 2023. El primero está relacionado con Eventos Verdes y el segundo con el Deportivo Saprissa.

Al conjunto morado, el INS le avaló, el 30 de junio de 2023, un acuerdo por ¢156 millones, cifra a pagar a través de pólizas durante un año. Sin embargo, un mes después de formalizado el contrato, el Deportivo Saprissa quedó moroso con el Ministerio de Hacienda por ¢29,1 millones.

La imagen muestra que, para julio de 2023, el Deportivo Saprissa S. A., firma patrocinada por el INS, mantenía una deuda millonaria por el no pago de impuestos.

Esa condición se mantuvo hasta hace semanas, pues el 14 de setiembre anterior, en una entrevista con este diario, se le mostró la información a la subdirectora de Relaciones Corporativas del INS. En esa cita, agregó que la responsabilidad de verificar la condición tributaria de los patrocinados correspondía a la oficina de Cumplimiento.

El 19 de setiembre, por medio de un correo electrónico, el INS dijo que procedió a solicitarle una explicación a Saprissa sobre ese pendiente. El viernes pasado, la deuda en Hacienda ya no aparecía a nombre del Deportivo Saprissa.

Por medio de su oficina de prensa, el Deportivo Saprissa expresó que siempre que participan en una contratación con un ente estatal se verifica “en los sistemas correspondientes que está al día con todas sus obligaciones”.

“De igual forma, la institución pública exige y verifica que la empresa a contratar esté al día en sus obligaciones”, añadió el club de fútbol.

Problemas con patrocinios

Un informe de la Contraloría General de la República (CGR) señaló, meses atrás, posibles irregularidades en la forma que el Instituto Nacional de Seguros (INS) otorgó, entre 2019 y 2022, contratos de patrocinio a cámaras empresariales, atletas, un equipo de fútbol de la Primera División y fiestas cívicas, entre otras actividades.

Según la División de Fiscalización Operativa y Evaluativa de la CGR, el INS entregó fondos públicos a terceros a través de patrocinios sin acreditar que esas inversiones traerían beneficios económicos para la aseguradora estatal.

Entre los patrocinios aprobados en esa condición, según el oficio DFOE-DEC-0955, están los firmados con el Deportivo Saprissa, el atleta olímpico Kenneth Tencio, la agencia de vehículos Veinsa, la Cámara de Exportadores de Costa Rica, la Cámara de Industrias de Costa Rica y el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), entre otros. Los convenios ascienden a ¢234 millones.

De los 13 patrocinios analizados por la Contraloría, cinco registraron un beneficio económico inexistente o “igual a cero” para la institución, y ocho contabilizan rendimientos menores al monto transferido al patrocinado, lo cual va en contra del artículo 8 de la Ley General de Contratación Pública.

Esa normativa establece que a la hora de firmar un patrocinio, las instituciones públicas deberán “acreditar” que se trata de “una actividad que le genere ventajas económicas”. Además, el artículo 60 del Manual de Reglamentos Administrativos del INS señala que ese tipo de convenios deben ser justificados “ampliamente” y debe realizarse un análisis de costo-beneficio “entre el monto solicitado en patrocinio versus los beneficios cualitativos y cuantitativos ofrecidos por el patrocinado”.

No obstante, la oficina de prensa del INS reconoció, el 20 de julio anterior, vía correo electrónico, que nueve de los 13 patrocinios revisados por la CGR no poseen un análisis de costo-beneficio, como lo exige la legislación.